jueves, 22 de marzo de 2012

La Homeopatia dará batalla a la medicina convencional.

Al día de hoy sólo representan 0.2% del total del mercado farmacéutico mexicano pese a que son hasta 70% más económicos que medicamentos tradicionales y 15% más que los genéricos.
Miguel Ángel Pallares Gómez


Ante el desabasto de medicamentos en instituciones de salud en el país, los laboratorios homeopáticos y la Escuela Nacional de Medicina y Homeopatía aseguran tener la capacidad para ser una opción económicamente más viable que los medicamentos genéricos y de patente.

A la fecha, la industria homeopática nacional sólo representa el 0.2% del total del mercado farmacéutico mexicano y su valor ronda los 300 millones de pesos.

Una de sus principales ventajas presumida por la homeopatía es la de tener la misma efectividad en comparación con un medicamentos convencionales y ser hasta 70% por ciento más baratos. Comparados con los medicamentos genéricos su precio es hasta 15% menor en promedio.

Esta industria podría crecer hasta 5 veces su tamaño actual en el corto plazo en caso de que existiera una política pública de apertura hacia el tratamiento de enfermedades con medicina alternativa, y aunque ya fue publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) un primer cuadro básico de medicamentos homeopáticos, todavía no hay luz verde para la venta de productos a las instituciones púbicas, pues no se especificó cuáles sustancias activas lo integrarían.

Desde el año pasado, el gobierno del Distrito Federal (GDF) comenzó la compra de medicamentos homeopáticos a laboratorios mexicanos y con ello los 4 laboratorios homeopáticos que integran la Asociación Nacional de la Industria Farmacéutica Homeopática (ANIFHOM) registraron un crecimiento en sus ventas de 15%. En el país existen en total 14 laboratorios productores de este tipo de medicamentos.

"Para este año, las expectativas de crecimiento son aún mayores para este sector debido a una mayor difusión y aceptación de la población mexicana hacia este tipo de medicamentos, pero también por la iniciativa del GDF", aseguró Héctor Torres Carbajal, presidente de la ANIFHOM.

El directivo recordó que el repunte en las ventas de la industria creció desde hace cinco años. 

“Tiene varias razones: los propios laboratorios han tomado acciones importantes para mejorar las condiciones de fabricación y la renovación de registros sanitarios ha permitido que se tenga una mejor regulación, dando más confianza a la población y al gobierno”, dijo.

Por su parte, Crisóforo Ordoñez, director de la Escuela Nacional de Medicina y Homeopatía del Instituto Politécnico Nacional (IPN), indicó que desde hace cinco años la homeopatía se comenzó a ofrecer en el Hospital Juárez de México, el Hospital General de México y el Hospital General Manuel Gea González.


Falta más cultura


“Actualmente hay más conciencia de parte del gobierno y las autoridades, pero todavía falta”, añadió.

Ordóñez precisó que la homeopatía no es una medicina tradicional, sino una terapéutica médica que utiliza productos naturales para su fabricación, sin ningún químico. “En Europa la homeopatía va al alza, existen países donde más del 70 por ciento de la población se atiende con métodos terapéuticos que no son los alópatas o convencionales, uno de ellos la homeopatía”, agregó.

Países como India, Inglaterra, Francia, Alemania y los Países Bajos son ejemplo en el uso de la homeopatía. 

“Aquí en México los detractores de la homeopatía tienen intereses detrás, dicen que son placebos o dulces, pero en los niños enfermos que se curan ¿dónde está el efecto  placebo?”, argumentó.

Torres Carbajal explicó para desarrollar la venta institucional de esta industria, en primer lugar se debe definir un cuadro básico de medicamentos, sin embargo, en la industria homeopática existen más de mil principios activos diferentes, lo cual dificulta la visión del gobierno en ese sentido.

Aún así, “la Comisión Permanente de la Farmacopea y el Hospital Nacional de Homeopatía, así como otros expertos, aportaron un cuadro básico, mismo que fue incorporado y publicado en el DOF el año pasado, donde se decía que las instituciones públicas podían tener acceso a este tipo de medicamentos, pero a la fecha no se han publicado los principios activos y por eso no podemos venderles”, dijo.


Apuesta del DF



Un caso diferente es el Distrito Federal, comentó, donde las Clínicas de Medicina Integrativa incluyen a la homeopatía dentro de sus tratamientos. “El GDF ha comprado vía asignaciones o concursos medicamentos a los laboratorios mexicano”, señaló Torres.

Crisóforo Ordoñez aseveró que por eso ha crecido nuestra industria en 2011. "Poco a poco se ha visto con buenos ojos que el gobierno está interesado la homeopatía. Eso puede potenciar un mayor crecimiento”, dijo.

Precisó que actualmente las ventas institucionales todavía no representan ni el 1 por ciento de las ventas de sus asociados.

Consideró que el mercado se encuentra en una etapa de desarrollo. “Estamos en pañales, estamos creciendo y hemos avanzado en los últimos años a una velocidad mayor. En Internet se hace difusión y las autoridades están promoviendo la homeopatía”, agregó.

“Ahora la necesidad hace ofrecer este tipo de métodos terapéuticos, los problemas de desabasto en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se resolvería. La homeopatía sería una solución, pero está difícil se necesitaría voluntad política superior, desde muy arriba”, destacó.

En una institución como el IMSS que es la más grande en el país, los intereses son tremendos y hasta el mismo gremio médico no le entre ni lo permite. En la comunidad científica hay duda, pero falta mucha información de estudios. El tiempo será lo que tarde o temprano cambie la situación”, abundó.

“Es una cuestión de dinero, la industria quimicofarmacéutica apoya a los hospitales e universidades con recursos y si ellos utilizan medicamentos que no son los suyos, simplemente no dan el apoyo”, apuntó Ordoñez.


Potencial



Para Torres Carbajal, el potencial para seguir creciendo con la apertura de los gobiernos locales y federales, puede llegar hasta incrementarse cinco veces el valor actual del mercado y llegar a tener un tamaño alrededor de los 1,500 millones de pesos en el corto plazo. 

“Todo depende del cuadro básico y que las reglas para participar estén claras”, afirmó.

Otro problema importante es la incredulidad hacia los beneficios de la homeopatía, pues la industria en nuestro país tiene más de un siglo desde su formalización y siguen siendo pocos los laboratorios participantes del mercado, así como los crecimientos de las ventas.

Los médicos alópatas o convencionales se resisten a aceptar las bondades de la homeopatía, más que las empresas farmacéuticas alópatas como Pfizer, Bayer o Sanofi, manifestó Torres.

En torno a los costos y utilidades en la industria homeopática, Torres Carbajal explicó que los bajos costos permiten recibir buenas ganancias. “Si esto no fuera negocio, las empresas que actualmente estamos en el mercado ya nos hubieras cambiado de giro”, apuntó

La homeopatía, a diferencia de la medicina alópata o convencional, requiere de una mayor participación de mano de obra para la manufactura de productos, su estrategia en medios es diferente y económica, y los proyectos de investigación y desarrollo de nuevos medicamentos no es tan completa ni cara como el caso las farmacéuticas multinacionales.

Una tendencia en los laboratorios homeopáticos nacionales es apostar por el negocio de las farmacias homeopáticas y consultorios para tener una cobertura mayor en el mercado. “Algunos laboratorios están buscando esquemas de franquiciamiento para tener más cobertura”, indicó Torres.

Los inversionistas, puntualizó, puedes ser desde capitalistas interesados en franquiciar una farmacia y otros con un perfil más industrial, con conocimientos en el mercado, buscarán tener mayor relación con el negocio. 

Actualmente en el país existen cerca de 300 farmacias homeopáticas, sin embargo, los productos homeopáticos comienzan a ser comercializados por las farmacias comunes.
Emprendedores
Viernes, 16 de Marzo de 2012 08:31
Redactor: Nelly Acosta

martes, 13 de marzo de 2012

Consecuencias del desequilibrio acido-alcalino

El desequilibrio ácido-alcalino.

Causa de la enfermedad y el envejecimiento.

Según esta teoría, las enfermedades no son causadas por virus o bacterias, microbios y gérmenes externos a nuestro organismo, sino que se trata más bien de la descomposición de nuestras células y tejidos, la que atrae a los gérmenes a su medio natural -tejidos en descomposición- provocando males mayores

¿Pero qué es lo que provoca la descomposición de nuestros tejidos?
Para comprenderlo mejor, vamos a darle primeramente un rápido repaso a cómo funciona la bioquímica del cuerpo.

Bioquímica del cuerpo.

El medio líquido de nuestro organismo es tremendamente sofisticado, transportando cargas y potenciales electroquímicos que afectan al ph del medio. Un ph demasiado ácido o alcalino puede obstaculizar la eficiencia de la química y las funciones del cuerpo. Cuando se da un exceso de acidez, el organismo responde, intentando proteger las células y tejidos sanos, activando cualquiera de los sistemas, en la sangre, linfa, células, pulmones y riñones. Pero a veces el organismo se encuentra sobrecargado por un exceso de acidez, y cuando ya no puede neutralizar de manera eficaz este exceso de ácidos y eliminarlos, éstos quedan depositados en los fluidos extracelulares y las células del tejido conectivo, comprometiendo directamente la integridad celular.
Cuando los ácidos se van acumulando, éstos comienzan a erosionar las venas, arterias, células y tejidos, derivando en una desorganización celular denominada enfermedad degenerativa.
Podemos decir que las alteraciones en el ph del organismo crean un medio que favorece que las células sanas degeneren en células enfermas o gérmenes que pasarán a través de varios estados de fermentación. En este proceso se producen nuevos desechos ácidos que aún desequilibran más el ph y llegan a interferir en los biosistemas del cuerpo, dando lugar a diferentes tipos de sintomatologías.
Teniendo en cuenta, pues, que la salud está definida por el equilibrio ácido/alcalino de nuestro organismo, y sus componentes más básicos, los tejidos, las células, etc., nuestro interés principal debería centrarse en mantener este equilibrio, observar las causas que provocan la desestabilización y evitarlas o neutralizarlas convenientemente.
Para ahorrarnos las explicaciones acerca de cómo funcionan los fundamentos del ph, los ácidos y las bases, digamos que en la escala que se baraja para medir el ph del organismo, se considera el 7 como un medio neutral. Los números por debajo del 7 son ácidos, siendo el 0 el más ácido (el 1 correspondería a los jugos gástricos del estómago). Consecuentemente, los números por encima del 7 son alcalinos.


Fuentes de desequilibrio del ph.

Recordemos una vez más que cuando tiene lugar el desequilibrio del ph producido en los tejidos y fluidos del cuerpo se crea el medio perfecto para que los gérmenes se desarrollen, causando una multitud de síntomas que denominamos equivocadamente enfermedades (dado que la enfermedad real consistiría en esta desestabilización del ph en diferentes áreas de nuestro organismo).
Según Robert O. Young y Shelley Redford Young (que han venido a recuperar en la última década las teorías de una larga lista de investigaciones en esta misma línea), este desequilibrio puede ser producido por diversos factores:
  • Los pensamientos y palabras que responden a emociones fuertes.
  • Música impactante y estresante.
  • Fumar y respirar humos y aire contaminado en general.
  • Alimentos ácidos como el cerdo, buey, pollo, pavo, pescado, huevos, lácteos, pan y cereales, café, alcohol, chocolate y frutas dulces como manzanas, naranjas, uvas y piña.
No se trata de prohibir todos estos alimentos mencionados, sino de evitarlos en esas situaciones en las que percibamos un desequilibrio en nuestro organismo, que por lo general suele ser ácido.En cualquier caso, Rober O. Young nos ofrece unas directrices generales en cuanto a los alimentos que deberíamos evitar y, por el contrario, los que se aconseja incluir en la dieta, así como una pirámide guía en nuestra alimentación diaria.


El principal desequilibrio, la acidez.

Dada la composición de nuestro organismo, de tendencia al medio ácido, y la de los productos de que nos alimentamos, la principal causa de desequilibrio de nuestro ph radica en la excesiva acidez. Para contrarrestar esta situación, debemos:
  • Evitar alimentos ácidos (carnes y derivados animales, incluidos los lácteos, azúcares refinados y pastelería, pistachos, cacahuetes, maíz, azúcar, condimentos como el ketchup y la mayonesa, alcohol, productos enlatados y embutidos, piñas, naranjas y frutas dulces en general, como el mango, uvas, peras, manzanas, etc.)
  • Tomar alimentos alcalinos (soja en todas sus variedades, aguacates, zanahorias, alfalfa germinada, pepino, col, apio, espinacas y hojas verdes en general, guisantes, ajo, etc.)
  • Evitar azúcares, incluidas frutas dulces, pastelería y pasta (macarrones, espagueti, etc.).
  • Hidratación continuada: agua purificada (evitando todo tipo de sodas, alcohol y estimulantes como el café).

La pirámide de Robert O. Young.

De abajo hacia arriba, la pirámide viene definida como sigue:
  • Basa tu alimentación en los vegetales.
  • Seguidamente, toma abundantes granos germinados y legumbres, lo que supone una buena fuente de magnesio y minerales.
  • Semillas y nueces (las almendras son especialmente una buena fuente de calcio, vitamina E, etc.)
  • Aceites ácidos esenciales, como omega 3 y omega 6 (aceite de linaza, de oliva, etc.)
  • Frutas poco dulces y granos (el aguacate es una buena fuente de energía).


Alimentos a evitar.

  • Elimina la no-comida basura: conservas, grasas animales, sal, azúcar refinado, carbohidratos refinados (frutas dulces), etc.
  • No te pases con la fruta dulce (excepto el limón o la lima; un vaso de agua purificada con unas gotas de limón por la noche, antes de acostarte, tiene un excelente efecto detoxificador).
  • Evita la carne de cerdo, de buey, de pollo, los huevos, productos lácteos y todos los derivados de la carne. Evita los productos muertos y busca los productos vivos.
  • Desecha los granos y patatas almacenadas en la despensa durante largo tiempo.
  • Evita los condimentos, el alcohol, la cafeína.
  • Evita los cacahuetes y el maíz, medio fácil para los hongos.
  • Evita el aceite calentado y la comida calentada en microondas.


Los alimentos que no deben faltar.

  • Vegetales de hojas oscuras verdes y amarillas (una potente fuente de clorofila, vitaminas y minerales, fibras, encimas, fitonutrientes, etc.).
  • Granos germinados, como la alfalfa o la soja germinada.
  • Carbohidratos vegetales, como las zanahorias, patatas, calabaza, boniatos, etc.
  • Legumbres y granos que no hayan estado largo tiempo almacenados.
  • Soja.
  • Agua, agua y más agua, pero que sea limpia, purificada.